 | La Casa De La Playa Título original: La maison de la plage Autores: Séverine Vidal y Víctor L. Pinel Traducción: Lorenzo F. Díaz Buendía Editorial: Nuevo Nueve Año: 2019 |
Me cuesta admitir que este puede ser nuestro último verano. Siento un fuerte lazo con esta casa. Siempre he tenido la impresión de que quería decirnos algo. Pero, ¿qué?
En la casa de la playa la familia pasa cada verano. Los tres hermanos, sus hijos y Elno, el pequeño. Pero este año el ambiente es espeso. Albert, uno de los tres hermanos, quisiera recuperar su parte. Su sobrina Julie no puede ni imaginar lo que es dejar esta casa. Embarazada y habiendo perdido a su compañero en un accidente automovilístico, la joven cruza por completo el umbral de la casa a oscuras.
Apoyada por su prima Coline espera la llegada del resto de la familia con la esperanza de que se encuentre una solución para que la casa de la playa no se venda. Por medio, un precioso enigma escrito en la pared nos hace revivir otras épocas y los deseos de otros dueños.
En la casa de la playa la familia pasa cada verano. Los tres hermanos, sus hijos y Elno, el pequeño. Pero este año el ambiente es espeso. Albert, uno de los tres hermanos, quisiera recuperar su parte. Su sobrina Julie no puede ni imaginar lo que es dejar esta casa. Embarazada y habiendo perdido a su compañero en un accidente automovilístico, la joven cruza por completo el umbral de la casa a oscuras.
Apoyada por su prima Coline espera la llegada del resto de la familia con la esperanza de que se encuentre una solución para que la casa de la playa no se venda. Por medio, un precioso enigma escrito en la pared nos hace revivir otras épocas y los deseos de otros dueños.
La casa de la playa supone la segunda colaboración entre la guionista francesa Séverine Vidal y el dibujante madrileño Víctor Lorenzo Pinel y es una entrañable y tierna historia que remite parcialmente a la igualmente excelente La casa, del valenciano Paco Roca. También aquí tenemos a tres hermanos que se enfrentan a la posible venta de la casa en la que vivieron parte de su juventud y, tal como sucedía en la obra del autor de Arrugas, les asaltan las dudas al recordar algunos de los momentos vividos en ella. Una casa que, además de los recuerdos de los miembros de las diferentes generaciones de la familia protagonista, guarda también un secreto que los autores del cómic van desvelando progresivamente al lector a través de una narración fragmentada en tres líneas temporales distintas. No necesitan muchos más ingredientes para conseguir un trabajo con un encanto indudable al que únicamente quepa reprocharle que se hace demasiado corto.
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